“Si no puedes vencer en tu lucha contra la basura, únete
a ella. Allí donde nada es basura, todo lo es.” (1)
La palabra basura ha significado y es para la mayoría de las personas algo despectivo que carece de valor y de lo que hay que deshacerse. De esta forma lo útil, que no siempre es necesario, se convierte en un estorbo y es causa de un primer embrollo: ¿cómo nos desentendemos de lo que producimos y consumimos después de ser utilizado?.
El problema radica en que la aparición de la basura es inevitable e inexcusable.
Solución: entender que la basura no es más que una oportunidad para evitarla.
Aquello que no esté legitimado culturalmente puede ser aprovechado y potencializado de manera tal que produzca reacciones en cualquier ámbito social, cultural, religioso, etc. En este caso el concepto "basura", es aplicado y re-significado para evidenciar nuevos puntos de vista ante lo que siempre fue subestimado, debido a su concepción de "residuo": Residuo social, residuo comercial, residuo material, residuo religioso, residuo alimenticio, etc.
Así pues, mediante prácticas artísticas se plantean nuevas formas de entender, socializar, cuestionar y potenciar el desecho.
El Reciclaje juega un papel primordial en el campo de re-utilización puesto que acoge una cantidad inmensa de significaciones desde sus cualidades físicas hasta sus propiedades matéricas.
El colectivo Monomero propone mediante la re utilización de conceptos y materiales la resignificación de ideas concernientes a lo residual, entendiendo ésto como un insumo más para la creación, socialización y reestructuración de los mal llamados desechos(en todas sus connotaciones).
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(1)Pardo Jose Luis, Nunca fue tan hermosa la basura, Ed Galaxia –Gutemberg, Barcelona, España, 2010
